Espacio de conversación política sobre el futuro de Chile



Usemos la política 2.0 para poner a Chile Primero


E-mail this post



Remember me (?)



All personal information that you provide here will be governed by the Privacy Policy of Blogger.com. More...



Les presento a continuación un breve resumen de la exposición que ofrecí a los participantes del Encuentro Fundacional de nuestro movimiento político Chile Primero.

Armas de Construcción Masiva

Radiografía del futuro: Política 2.0

(Primera Parte)

No pretendo presentarles una tesis con respecto a lo que debemos hacer. Pero si pretendo presentar una intuición que venimos discutiendo, explorando y por sobre todo experimentando con un grupo creciente de chilenos que vemos en la era digital una oportunidad de democratización inimaginada para las generaciones anteriores.

En este sentido hoy expongo para mostrar a los miembros de nuestro movimiento que la dirección –eminentemente social- que esta tomando la Internet se condice con los valores de la centro izquierda que queremos para nuestro país.

Me gustaría comenzar haciendo un paralelo entre la evolución de Internet y la evolución de la política y sus formas de organizarse.

La Web 1.0 = Política 1.0

Cuando nació la Internet y hasta donde la conocemos en los 90, era un sistema de comunicación unidireccional. Es decir, un editor en alguna parte del mundo tenía el exclusivo derecho de editar y publicar una web, y muchos otros lectores en el mundo tenían la suerte de mirar, leer y quedarse reflexionando frente a sus teclados. No se cumplía la promesa de “estar todos conectados en red”, ya que la comunicación era de unos pocos para unos muchos.

Aquí deseo establecer el primer paralelo entre la web 1.0 y la política como tradicionalmente la conocemos. En esta última, los ciudadanos estamos acostumbrados a que la participación en política consistiera en elegir cada 4 años nuestros representantes y durante el tiempo que resta, observar por televisión y radio como se construía la agenda política según la deliberación entre gobierno y oposición. En esta política 1.0 el activismo estaba limitado a los funcionarios de partidos, los funcionarios públicos y algo más para ser generosos.

La organización de la política es jerárquica y tiende a las oligarquías internas. No promueve la participación de los militantes y adherentes, matando la inteligencia colectiva de los partidos y movimientos: las ideas se concentran en las cúpulas con una evidente pobreza.

Nace la Web 2.0: Internet Social

Desde el 2000 a esta parte, hemos observado una evolución de la web y la Internet. Esta ha cambiado su lógica de comunicación unidireccional por una comunicación multidireccional. La estructura de Internet permite y facilita la interacción directa entre los “publicadores de contenidos” y los meros “usuarios/lectores”. Esa dicotomía empieza a desaparecer y ahora el usuario común y corriente también puede ser generador de contenidos y de interacción social. La Internet deja de ser un espacio de “información” y se transforma en un espacio de “relaciones sociales”. Lo constitutivo de Internet es estar en red con otros y ahora todos conversan con todos: los editores dejan de bajar la información a los lectores.

¿Qué implicancias tiene esto para su paralelo con la política?

La revolución de la red trae consigo una revolución en las formas de participar. Ya no solo de informarse como ocurría con la Web 1.0, ahora han cambiado las formas de relacionarse y por tanto de organizarse.

La Web 2.0 –internet social- es el telón de fondo o la cancha donde comienza a aparecer formas de participación políticas no convencionales. En suma: el que estemos todos conectados y podamos articular comunidades y conversaciones abiertas e interactivas nos abre un campo infinito para cambiar la lógica política de participar solo cada 4 años en una elección.

Pero antes de meternos de lleno en la forma de funcionar de esta nueva política 2.0 por medio de la sociedad red, quisiera presentar algunos ejemplos que muestren la dirección que toma la era digital, sus movimientos y cambios de poder, para entender que estos se condicen con nuestros valores de solidaridad, justicia, emprendimiento y libertad.

MATERIAL DE FUTURO: el Nuevo Periodismo que nace

Los esfuerzos realizados por un grupo de chilenos –como Gato Gamboa- en la década del 60 e inicios del 70 para levantar una alternativa periodística como el diario El Clarín y competir con los dueños del capital, hoy no tendrían sentido. El periodismo de papel pertenece a la era industrial. Para competir en dicho mercado había que tener capital: los medios de producción del periódico siempre fueron muy altos.

Hoy las cosas han cambiado, la historia nos entrega un regalo único para echar a volar la imaginación y para que David le vuelva a ganar a Goliat. Esto es por una sencilla razón: los medios de producción cambiaron. ¡Escúchenlo bien!, desde mi laptop –nuevo medio de producción- puedo competir a escala mundial. El problema de hoy ya no es ser dueño del capital, los costos se han reducido enormemente en la fabricación de periódicos, radios, películas, etc. La pregunta de hoy es ser dueño del talento para conseguir lectores.

En este contexto hemos visto el nacimiento de miles de periódicos digitales en todo el mundo. Pero estos siguen manteniendo la lógica del periodismo tradicional: el periodismo es hecho por periodistas.

El ocaso del Periodismo Industrial

Sin embargo en Corea del Sur ha nacido un periódico que tiene características propias. El dueño del medio, Mr. Oh, un joven de 23 años invita a sus lectores a que sean “corresponsales ciudadanos” y colaboren en la construcción diaria del periódico. La condición no era haber pasado por alguna escuela de periodismo. Todo aquel que quisiera y se apegue a las normas de respeto del diario podía hacerlo. Hoy tiene más de 40 mil por todo el mundo.

En Arica, hace 1 año y dos meses nació por Internet la copia pero en español: el primer periódico ciudadano del mundo hispano-parlante. Se llama El Morrocotudo y partió con un equipo de 30 corresponsales ciudadanos. Hoy tiene más de 500 ciudadanos que construyen el diario.

El diario de la red de El Mercurio regional, La Estrella de Arica, que lleva 35 años siendo el medio de la ciudad ha sido sobre pasada por el periodismo ciudadano. El Morrocotudo es el diario por Internet más leído del norte de Chile, con 7 mil lectores por días, dejando a La Estrella muy por debajo de esta cifra.

Frente a la pregunta de si el periodismo ciudadano reemplazará al periodismo industrial, no tenemos como saber. Yo intuyo que no. Pero esa no es la pregunta que inspira mi exposición, más bien: ¿Cómo el mundo digital permite la organización barata, sencilla y rápida de diarios que con una óptica ciudadana dejan la responsabilidad de inventar la realidad -periodismo- a los propios ciudadanos?

La centro izquierda debe estar interesada en la democratización de los medios de prensa, ya que promueven apropiación y empoderamiento para los ciudadanos de una comunidad. El sentido de pertenencia es local y las preocupaciones son globales.

Sumado a esto, el hecho de que los corresponsales no sean pagados, promueve un avivamiento ciudadano donde los equipos movilizadores deben tener la capacidad de competir comercialmente con un producto hecho por ciudadanos comunes y corrientes. La excelencia es una conversación constante, concepto de la nueva empresa social.

El periodismo no escribe sobre la realidad, la inventa

El Morrocotudo y el periodismo ciudadano esta orientado a un estado mayor de la comunicación social. Ya no basta con convertirse en un espacio de expresión donde los ciudadanos tienen derecho a voz. Además se perfila como un experimento de transformación social donde los ciudadanos por medio de la red se organizan, articulan y hacen pasar acciones en conjunto.

El objetivo no es ser observadores de la realidad, sino por el contrario usar los medios de comunicación digital para hacerse cargo de anomalías sociales y hacer pasar acciones colectivas.

MATERIAL DE FUTURO: software libre para una sociedad libre

En los negocios tecnológicos de software existe un paradigma que ha comenzado a ser cambiado. La mayoría de los usuarios de computadores en el mundo están acostumbrados a creer que es justo pagar por las Licencias de creación de un software. Yo no solo pago por la compra de mi maquina, sino además debo pagar a los creadores de los programas que me lo echan a andar.

Este es el sentido de propiedad que todos conocemos. Alguien inventa un programa en alguna parte del mundo y junto con mantener en secreto el código fuente con el que lo creo, cobra por la licencia de uso. Yo no puedo hacer uso de él en mi maquina si yo no pago por al dueño de la licencia.

Sin embargo, en EEUU ha nacido un movimiento alternativo a esta interpretación de la propiedad digital. Richard Stallman ha puesto en marcha un movimiento para la liberación del software.

Ahora los creadores/programadores de software liberan o comparten el código fuente con el que hacen los programas, lo que permiten que otros creadores lo utilicen para otras aplicaciones. Además las creaciones se liberan en la red y los usuarios las pueden encontrar gratis en Internet. En el software libre nadie paga por la licencia de uso, la riqueza se genera de otra manera.

Para explicar lo que significa esto, daré un ejemplo del empresario chileno Paolo Colonnello:

Voy a lo menos una vez al año con un grupo de amigos al espectacular lago Yelcho. El lago es un recurso valioso y delicado, lo cuidamos mucho, pescamos exclusivamente con mosca, (lo cual permite devolver los peces) cuidamos el agua, ayudamos a la gente de la zona, denunciamos pesca ilegal, algunos incluso plantan truchas y un tema común de los viajes es como proteger y cuidar más la zona. Esto no lo hacemos por motivos morales, sabemos que al cuidar el Yelcho, nos cuidamos a nosotros, cuidamos un recurso al cual queremos vayan nuestros hijos en el futuro.

Comiendo Truchas Gratis

Uno de los mayores placeres es hacer un asado a la orilla del lago y comer un par de truchas (las que no tuvieron la suerte de ser devueltas!). La gente que vive a orillas de lago las pesca y las come a diario, no las compra, las truchas son de todos. Esas truchas son gratis. Pero ¿puedes creer que algunas personas venden esas truchas?, se las venden a otras personas de la zona que no quieren o no saben pescar, para quienes es más valioso pagar por las truchas. Estos pescadores generan distintos tipos de servicio de valor agregado, como llevar la pesca del día antes de cierta hora a la casa de los compradores o procesar los peces (ahumado/descamado, etc), estos pescadores se generan distinta fama y no es raro escuchar comentarios como "las truchas de don Lalo son las mejores" con lo que don Lalo, por supuesto, se da el lujo de cobrar más por ellas. Por que son mejores las de don Lalo y los compradores están dispuestos a pagar más por ellas que por otras o porque simplemente los compradores no las pescan ellos, simplemente porque comprarlas les genera mayor valor.

El open source es lo mismo, hay una comunidad que genera y cuida un recurso, que en este caso es el software, (hay personas que lo usan y lo prueba, hay otros que lo promocionan, hay otros que lo desarrollan, etc.) cada uno por sus propios motivos. Las empresas que hacemos negocios con open source, tomamos este recurso y generamos valor a nuestros clientes, muchas veces proveyendo servicios de valor agregado, como pruebas de calidad, soporte, desarrollo, etc. La gran mayoría del software open source no esta listo para ser usado por un clientes sin preparación técnica, es necesario configurar bases de dato, integrar sistemas, adaptar o simplemente traducir el idioma. Para esos clientes es de mayor valor pagar por un servicio que les asegure calidad

El movimiento de software libre desdibuja el tradicional concepto de propiedad. Aquí la propiedad es colectiva y el trabajo colaborativo es fundamental para que la generación de riqueza ocurra, ya que sin un “lago con buenas truchas” no se puede agregar valor.

Además hay valores libertarios en este tipo de movimientos ya que promueven el uso del software libre en la educación pública, en los gobiernos para garantizar su independencia y en aplicaciones hacia la cultura y la flexibilidad de las patentes. Esto es algo que la izquierda moderna debe explorar.

MATERIAL DEL FUTURO: Cultura Libre para una sociedad creativa

Siempre hemos estado acostumbrados a ser consumidores de cultura, pero ahora viene la era donde también nos convertimos en creadores. Ese es un cambio societal, parecido quizás a lo que vivieron los hombres durante el Renacimiento.

Y la cultura ha sido siempre un remix de obras pasadas. El propio caso de Disney es un ejemplo de mezcla de obras culturales. Los cuentos de los cuales hicieron sus primeras películas animadas eran cuentos de terror de los alemanes hermanos Grimm. Nadie le cobro por los derechos de autor a Walt Disney, dichos cuentos eran parte del espacio público de cultura. Así funciona la generación de cultura y aún más en una sociedad donde los consumidores han pasado –gracias al cambio de los medios de producción- a ser verdaderos creadores de contenidos culturales.

Es precisamente en esa sociedad donde los grandes medios intentan ejercer presión para que se coarte el espacio público de cultura. En el Congreso de los Estados Unidos estas trasnacionales de la cultura han presionado para que los derechos de autor tengan mayor vigencia luego de la muerte del autor. En su origen fueron 30 años la duración de los derechos sobre la obra, hoy son 70 y se sigue la batalla para su expansión.

Pero ¿Cuál es el desafío político que debiera inquietar a la centro izquierda?

Los creadores de cultura deben ser protegidos pero eso no debe derivar en un entendimiento –desde el fanatismo neoliberal- de los derechos de autor como trabas para la creatividad en una sociedad.

Los valores de la centro izquierda deben proteger el acceso de una sociedad a la cultura y por tanto a la capacidad de acceso a la creatividad y la innovación. Sin derechos de autor flexible nadie podrá basarse en el otro para crear y mejorar una obra. Sin derechos de autor flexibles no se podrá potenciar más creadores que libremente hagan uso del espacio público de cultura.

La buena noticia para nosotros es que la era digital ha incubado movimientos que se han rebelado contra el extremismo en el uso de los derechos de autor. Movimientos que liderados por el profesor norteamericano Lawrence Lessig han propuesto y difundido licencias alternativas a la tradicional C de “todos los derechos reservados”.

En este caso el movimiento Creative Commons o Creaciones Comunes establece una alternativa a los creadores de obras para que solo reserven algunos derechos de sus obras. Invitándolos de esta manera a proteger y agrandar no solo el espacio de derechos para el autor, sino también los derechos para los que aun no son autores y quieren serlo.

La CC es un llamado a la creatividad y a la cultura libre, con respecto a los creadores sin duda. La centro izquierda moderna debe mirar estos fenómenos de solidaridad y cultura.

Espera la segunda parte y final...


0 Responses to “Usemos la política 2.0 para poner a Chile Primero”

Leave a Reply

      Convert to boldConvert to italicConvert to link

 


  • Administrador
  • Santiago, Chile