Un gran amigo, Claudio Pinto, me entregó un texto del Profesor
Humberto Giannini titulado
La “reflexión” cotidiana, de donde quiero compartir unos fragmentos que me parecen realmente reveladores:
Tengamos en cuenta que la vida en común es un constante intercambio de voces y expresiones –y de silencios, también– que constituyen en definitiva la experiencia lingüística de una comunidad y el criterio último de lo que es significativo o insensato.
El hombre, al comunicar, es portador de una experiencia personal; pero, también lo es sin saberlo de una experiencia colectiva e histórica; arcaica, a veces. Cuando se examina el discurso corriente –el habla– en sus grados de significabilidad, debería tenerse esto en cuenta.
Lo que aquí se denomina
vida en común es lo que da origen a múltiples espacios que se creen relacionados solo con el carácter individual del ser humano. El espacio relacional construido con los otros –lleno de voces, expresiones y silencios– es lo que determina todo lo que conocemos. Estas voces, expresiones y silencios constructores están cargados de nuestra historia, miramos el mundo desde donde estamos parados, desde nuestra biología, desde nuestra experiencia. Esto no es nada nuevo, pero muchas veces lo olvidamos y exigimos a otros que actúen desde experiencias e historias que no tienen.
Para finalizar esta construcción lingüística –y demostrar que este post les pertenece más a otros que a mi mismo– quiero presentar otro extracto que también me lo presentó un gran amigo, Diego Sazo, para graficar la construcción de espacios permitidos por esta vida en común:
Hannah Arendt en su libro
¿Qué es la Política? Cuestiona la interpretación aristotélica del hombre como un ser esencialmente político (
zoon politikon) en los siguientes términos:
Como si hubiera en el hombre algo político que perteneciera a su esencia. Pero no es así, el hombre es a-político. La política nace en el entre-los-hombres, por lo tanto completamente fuera del hombre. De ahí que no haya ninguna sustancia propiamente política. La política surge en el entre y se establece como relación.
José, debo decirte que me gustaron dos cosas del texto:
1.- Asualmente le pedimos a gente que actue desde una biologia y una historia que no tienen, por lo tanto no puedes actuar así. Super buena reflexión, me sirve harto.
2.- La concepción de Política de Hannah Arendt es la que comparto más. Me parece que hace la diferencia en una aparente sutileza con Aristoteles, pero finalmente dice mucho, la "relación".
Buena J,
Hannah Arent, entrega una interesante propuesta acerca de como la política, marca la diferencia en muchos aspectos. Te recomiendo que leas tambien uno de sus cuentos titulado "El zorro de Heideggert" de seguro te interesará, es uno de los cuentos donde plasma su percepción del filosofo.
Felicitaciones tambien por los ultimos post, es evidente el progreso y la mayor sincronia.
Un Abrazo,
Clau.
Primero que todo gracias por lo de gran amigo, en segundo lugar quiero compartir contigo mi apreciacion de este gran texto.
Creo y concuerdo con el texto en que muchas veces es mirado el mundo cotidiano en menos-ya sea por se cree que es carente de racionalidad o porque simplemente las trivialidades no son importantes-y se desconoce la importancia de este mundo, importancia que radica en que es aquel mundo la base de todo lo que conocemos, es decir,es este mundo y su constante intercambio de ideas, voces y tambien de silencios,como dije anteriormente la base de todo, porque estas conversaciones estan cargadas de la historia de cada uno de los emisores que conversan en este mundo cotidiano, es por esto que es tan importante la conversacion porque solo asi podremos crear esta "vida en comun" y la razon es simple, porque solo asi podremos conocer la historia del otro y que el otro conozca mi vida, mi historia.